AMOR, UNA PALABRA TAN FÁCIL DE DECIR

1. Hablar de amor desde el encierro es bastante complicado… el amor no es posesión. El amor es cosa seria y para personas valientes; es por instantes, olvidarte de ti y pensar en el bienestar de la persona que amas, bien lo decía el maestro Erich Fromm: “El amor es el interés activo por la vida y promover el crecimiento de aquello que amas”. 

Para amar debemos tener claro que la persona que amamos no es de nuestra posesión, es una persona libre que comparte por un instante la vida contigo. Siempre debes de recibirla con un gesto de agrado, con una sonrisa a pesar de cómo se comporte contigo, o que no llegue a la hora precisa o que no te traiga el detalle que prometió. Debemos ser amables en el amor, aunque no se compartan las mismas ideas o preferencias, o que en lugar de besos y abrazos recibas regaños… 

El amor conlleva entrega, debe ser generoso pero recíproco, las mujeres son así, seres excepcionales para eso del amor.

2.El amor tiene miles de manifestaciones, comúnmente lo concebimos como besos, abrazos, caricias y sexo, pero creo que algo mucho más que eso…

Has escuchado la famosa frase “amarte duele”, sé que algunos prefieren entenderlo como una película romántica con final feliz. ¿Quién nos dijo que la vida es color de rosa?  ¿No quieres sufrir? Entonces muy probablemente no conozcas el amor de verdad y todo esto que escribo desde el encierro, no tiene que ver con la edad, habrá quien conozca el amor en su juventud, o como yo, en mi madurez, pero puedo decir que en este momento se disfruta a plenitud y se sufre con la misma intensidad.   Sé ahora, a mi edad y desde el encierro que cuando lo sufres te conoces más y valoras el amor más; que, aunque con su ausencia sufras y quieras maldecir, el amor por ella siempre estará allí.  ¡Cosa linda!

3. Amar es comprender y aceptar. Suena sencillo, pero es tan difícil de lograr. Amar es no culpar a esas personas especiales, en ocasiones, no podemos dar lo que nunca nos fue enseñado. 

Hay personas que saben comprender porque fueron comprendidas, hay personas que bien saben amar porque fueron bien amadas. No importa cómo seas, cómo actúas, cómo piensas, incluso podrás tener una vida llena de errores, pero esa persona jamás dejará de amarte. Te comprende y acepta tanto que habrá ocasiones que te regañe o te deje de hablar por algún tiempo, pero en el fondo tú sabrás que nunca dejará de amarte; te ama porque te acepta con todos tus errores y defectos porque el amor es aceptación.

¿Sabes algo? Tendríamos que aprender mucho de esas mujeres generosas que aman sin condición, sin límites como el amor de tu mamá… ¿Cosa linda!

4. El amor es más que un sentimiento. ¿Puedes imaginar cómo son las emociones y los sentimientos? Son como un yo-yo suben y bajan, pero el amor no debe ser así, se debe cristalizar, forjar, no debe depender de tu estado de ánimo. ¿Sabes? problemas todo el mundo tiene y a veces con solo dialogar los problemas se pueden solucionar. El amor es diálogo, acuerdo y vínculo de confianza.

¿Crees que hoy puedes amar mucho y mañana menos? El amor debe de ser una decisión, una tarea de todos los días. Debe demostrarse todos los días. Comprometerse con el amor es dar lo mejor de ti todos los días y aunque nadie te asegure un final feliz ¡si lo tienes disfrútalo y aprendamos amar sin medida y con generosidad!  ¡Cosa Linda!

5. El amor es como un bebé. Las personas hablar de amor, esa ilusión que provoca la alegría de los bebés en nuestras manos, eso momentos inolvidables que compartimos con esas pequeñas especiales.

Mi mamá decía: “el amor hay que cuidarlo y regarlo todos los días”. En ese tiempo pensaba que mi madre ya estaba viejita. ¿Sabes algo? Ella tenía toda la razón, hoy siendo una persona madura, tengo muy claro que perdí lo más amado: la pareja perfecta para mí, la inmadurez y mi inseguridad hizo de mí una no muy buena persona.

No supe cuidar eso tan lindo que la vida me dio, hoy tengo tan solo lindos recuerdos de ella y mira que verla tan cerca me pone contento, solo que sé que le hice daño. No hubo necesidad de golpes o gritos, ni escenas graves de celos.  No supe cuidar el amor más lindo de mi vida. Hoy recuerdo cuando mi hijo era un bebé, todos los cuidados que teníamos con él, quería adivinarle su pensamiento y resolverle todas sus necesidades, darle de comer, bañarlo, mimarlo, acariciarlo, decirle que siempre estaría ahí para cuidarlo… Estoy seguro de que con mi princesa exageré en cuidados y mimos.

Hoy sólo te puedo decir, desde mi encierro, que, si amas, cuida ese amor todos los días. Que no te suceda lo que a mí. Tengo mucho que agradecer puesto que ella sigue en lo más profundo de mi corazón. ¡Cosa linda!